La capacidad de tus pulmones es la cantidad total de aire que tus pulmones pueden retener. Con el tiempo, la capacidad y función de nuestros pulmones por lo general disminuye lentamente a medida que envejecemos, después de los 25 años.

Algunas afecciones como la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) puede acelerar significativamente estas reducciones en la capacidad y funcionamiento pulmonar. Esto causa dificultad para respirar y falta de aire.

Afortunadamente, existen ejercicios que pueden ayudar a mantener y aumentar la capacidad pulmonar, lo que facilita mantener nuestros pulmones saludables y obtener el oxígeno que tu cuerpo necesita.

La respiración diafragmática o “respiración abdominal”, involucra el diafragma, que se supone realiza el trabajo más pesado al respirar.

Esta técnica es particularmente útil en personas con EPOC, ya que el diafragma no es efectivo en estas personas y podría fortalecerse. La técnica se usa mejor cuando te sientes descansado.

Si tienes EPOC, pregunta a tu médico o terapeuta respiratorio que te muestre cómo usar este ejercicio para obtener mejores resultados.

De acuerdo con la Fundación para la EPOC, deberías hacer lo siguiente para practicar la respiración diafragmática:

  1. Relaja tus hombros y siéntate o recuéstate.
  2. Coloca una mano sobre tu estómago y la otra sobre tu pecho.
  3. Inhala a través de tu nariz durante dos segundos, siente el aire moverse en tu abdomen y tu estómago moviéndose. Tu estómago debería moverse más que tu pecho.
  4. Exhala durante dos segundos a través de tus labios fruncidos mientras presionas tu abdomen.
  5. Repite los pasos.

La respiración con los labios fruncidos puede reducir tu respiración, reduciendo el trabajo de respirar al mantener tus vías respiratorias abiertas por más tiempo. Esto facilita que los pulmones funcionen y mejora el intercambio de oxígeno y dióxido de carbono.

Este ejercicio respiratorio con frecuencia es más fácil para los principiantes que la respiración diafragmática, y puedes hacerlo en casa incluso si nadie te ha enseñado cómo. Se puede practicar en cualquier momento.

Para practicar la técnica de respiración con los labios fruncidos:

  1. Inhala lentamente a través de tus fosas nasales.
  2. Frunce tus labios, como si estuvieras enojado o si fueras a soplar algo.
  3. Exhala lo más lento posible a través de tus labios fruncidos. Esto debería tomar al menos dos veces el tiempo que te tomó inhalar.
  4. Repite los pasos.

La prevención es la mejor medicina, y trabajar para mantener tus pulmones saludables es mucho más eficiente que tratar de repararlos después de experimentar alguna dificultad. Para mantener tus pulmones saludables, haz lo siguiente:

  • Deja de fumar y evita el humo de segunda mano o los irritantes ambientales.
  • Come alimentos ricos en antioxidantes.
  • Vacúnate, por ejemplo, con la vacuna para la gripe y la neumonía. Esto puede ayudar a evitar infecciones pulmonares y mejorar la salud de tus pulmones.
  • Ejercita con más frecuencia, lo cual puede ayudar a que tus pulmones funcionen adecuadamente.
  • Mejora la calidad del aire en interiores. Utiliza herramientas como filtros de aire en interiores y reduce los contaminantes como fragancias artificiales, moho y polvo.

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