La secreción del pezón es cualquier líquido u otro fluido que sale del pezón. Es posible que tengas que apretar el pezón para que salga el líquido, o podría salir solo.
La secreción del pezón es común durante tus años reproductivos, incluso si no estás embarazada o amamantando. La secreción no suele ser grave. Aun así, puede ser una señal de cáncer de seno, por lo que vale la pena consultar a tu médico.
Sigue leyendo para obtener más información sobre los diferentes tipos de secreción del pezón y cuándo debes consultar con tu médico.
La secreción del pezón aparece en muchos colores diferentes. El color puede darte algunas pistas sobre la causa. En el siguiente cuadro encontrarás los colores de la secreción y algunas posibles causas en mujeres que no están amamantando. Puedes obtener más información sobre estas causas en la siguiente sección.
| Color | Posibles causas |
| blanca, turbia, amarillenta o con pus | una infección del seno o el pezón |
| verde | quistes |
| marrón o con apariencia de queso | ectasia del conducto mamario (conducto de leche bloqueado) |
| transparente | cáncer de seno, especialmente si solo proviene de un seno |
| con sangre | papiloma o cáncer de seno |
La secreción también puede tener diferentes texturas. Por ejemplo, puede ser espesa, ligera o pegajosa.
La secreción puede salir de un solo pezón o de ambos. Y puede salir sola, o cuando aprietas el pezón.
Algunos otros síntomas que podrías tener con la secreción del pezón incluyen:
- dolor o sensibilidad en los senos
- bulto o hinchazón en el seno o alrededor del pezón
- cambios en los pezones, como volverse hacia adentro, hoyuelos, cambio de color, picazón o descamación
- enrojecimiento
- cambios en el tamaño de los senos, como un seno que es más grande o más pequeño que el otro
- fiebre
- ausencia del período menstrual
- náuseas o vómitos
- fatiga
Cuando estás embarazada o amamantando, pueden salir pequeñas cantidades de leche de tus senos. La pérdida puede comenzar temprano en el embarazo y podrías continuar viendo leche hasta dos o tres años después de dejar de amamantar.
Sin embargo, las mujeres que no están embarazadas o que no están amamantando también pueden tener secreción. Otras causas de secreción del pezón incluyen:
- píldoras anticonceptivas
- infección o absceso en el seno
- papiloma del conducto, un crecimiento inofensivo similar a una verruga en el conducto mamario
- medicamentos que aumentan los niveles de la hormona prolactina productora de leche, como antidepresivos y tranquilizantes
- exceso de estimulación del seno o el pezón
- senos fibroquísticos
- cambios hormonales durante el periodo o menopausia
- lesión en el seno
- ectasia del conducto mamario, un conducto de leche bloqueado
- prolactinoma, un tumor no canceroso de la glándula pituitaria
- glándula tiroides hipoactiva
- cáncer de seno
El cáncer de seno puede causar secreción del pezón, especialmente carcinoma ductal in situ (DCIS, por sus siglas en inglés), una forma temprana de cáncer de seno que comienza en los conductos mamarios. También puede ocurrir con la enfermedad de Paget del seno, un tipo poco común de cáncer de seno que afecta al pezón.
Si tienes cáncer de seno, es probable que la secreción solo provenga de uno de los senos. Es posible que también tengas un bulto en el seno.
Sin embargo, la secreción rara vez se debe a un cáncer. Un estudio encontró que solo el 9 por ciento de las mujeres de 50 años o más que acudieron al médico por secreción del pezón en realidad resultaron tener cáncer de seno. Sigue siendo una buena idea hacerse un chequeo ante cualquier secreción mamaria, especialmente si es un síntoma nuevo para ti.
La secreción del pezón no suele ser motivo de preocupación. Aun así, debido a que puede ser una señal de cáncer de seno, consulta a tu médico para que la revise. Es especialmente importante consultar a un médico si tienes:
- un bulto en el pecho
- cambios en los pezones (como costras o cambio de color)
- dolor en el seno u otros síntomas de cáncer de seno
- la secreción tiene sangre
- solo un seno está afectado
- la secreción no se detiene
Tu médico comenzará haciendo preguntas sobre la secreción, que incluyen:
- ¿Cuándo empezó la secreción?
- ¿Está en un seno o en ambos?
- ¿Sale sola o hay que apretar el pezón para producirla?
- ¿Qué otros síntomas tienes?
- ¿Qué medicamentos estás tomando?
- ¿Estás embarazada o amamantando?
El médico realizará un examen clínico para examinar tus senos en busca de bultos u otras señales de cáncer. También es posible que te realicen una o más de estas pruebas:
- Biopsia. El médico extrae una pequeña muestra de tejido de tu seno para verificar si tienes cáncer.
- Mamografía. Esta prueba toma radiografías de tus senos para ayudar al médico a detectar cáncer.
- Ductograma. Esta prueba utiliza una mamografía y un material de contraste inyectado para tomar imágenes de los conductos lácteos dentro de tus senos.
- Ultrasonido. Esta prueba usa ondas sonoras para tomar imágenes del interior de tus senos.
Es probable que tu médico también te pida un análisis de sangre o de orina para saber si estás embarazada.
Una vez que sepas qué está causando la secreción del pezón, puedes tratarla si es necesario. Es posible que no sea necesario tratar la secreción que se debe al embarazo, la lactancia o los cambios hormonales. Tu médico puede tratar la secreción por otras causas según la afección.
¿SABÍAS QUE?Cada uno de tus senos contiene unos 20 conductos mamarios y puede salir líquido de ellos. Es normal que salga un poco de leche del pezón cuando estás embarazada o amamantando.
EN LOS HOMBRESLa secreción mamaria en los hombres no es normal. Siempre consulta a tu médico para que te realicen un examen.