La osteoporosis es una enfermedad que hace que el tejido óseo se vuelva más fino y menos denso. Esto provoca huesos debilitados que son más susceptibles a fracturas.

La osteoporosis presenta muy pocos síntomas y puede progresar a etapas avanzadas sin presentar ningún problema. Así que, a menudo no se descubre hasta que los huesos debilitados se fracturan o rompen. Una vez que tienes una fractura como resultado de la osteoporosis, eres más susceptible a sufrir otra.

Estas quebraduras pueden ser debilitantes. La mayoría de las veces, tus huesos debilitados no se descubren hasta después de una caída catastrófica que resulta en una fractura de cadera o espalda. Estas lesiones pueden dejarte con movilidad limitada o sin ninguna movilidad durante varias semanas o meses. También podría ser necesario un tratamiento quirúrgico.

La causa exacta de la osteoporosis es desconocida. Sin embargo, sabemos cómo se desarrolla la enfermedad y qué les hace a los huesos.

Piensa en tus huesos como entidades de tu cuerpo vivas, en crecimiento y en constante cambio. Imagina la parte exterior de tu hueso como un estuche. Dentro del estuche hay un hueso más delicado con pequeños agujeros, similar a una esponja.

Si desarrollas osteoporosis y tus huesos comienzan a debilitarse, los orificios en la parte interna del hueso se hacen más grandes y numerosos. Esto hace que la estructura interna del hueso se debilite y se vuelva anormal.

Si te caes cuando tus huesos están en este estado, es posible que no sean lo suficientemente fuertes para soportar la caída, por lo que se fracturarán. Si la osteoporosis es grave, pueden producirse fracturas incluso sin una caída u otro trauma.

La menopausia marca el final permanente de la menstruación y la fertilidad. Según el National Institute on Aging (Instituto Nacional sobre el Envejecimiento), la mayoría de las mujeres comienzan a experimentar los cambios de la menopausia entre los 45 y los 55 años.

A medida que las mujeres entran en la menopausia, sus niveles de estrógeno y progesterona comienzan a disminuir. El estrógeno actúa como protector natural y defensor de la resistencia ósea. La falta de estrógenos contribuye al desarrollo de la osteoporosis.

Los niveles disminuidos de estrógeno no son la única causa de osteoporosis.

Otros factores pueden ser responsables del debilitamiento de los huesos. Cuando estos factores se combinan con niveles reducidos de estrógeno durante la menopausia, la osteoporosis puede comenzar o desarrollarse más rápido si ya se está presentando en tus huesos.

Los siguientes son factores de riesgo adicionales para el desarrollo de la osteoporosis:

Edad

Alrededor de los 30 años, tu cuerpo crea más hueso del que pierde. Después, el deterioro óseo ocurre más rápidamente que la creación de hueso. El efecto neto es una pérdida gradual de masa ósea.

Fumar

Se ha demostrado que fumar aumenta el riesgo de desarrollar osteoporosis. También parece causar un inicio más temprano de la menopausia, lo que significa que los huesos están protegidos por el estrógeno por menos tiempo.

Las personas que fuman también tienen más dificultades para recuperarse después de una fractura en comparación con los no fumadores.

Composición corporal

Las mujeres que son pequeñas o delgadas tienen un mayor riesgo de desarrollar osteoporosis en comparación con las mujeres que son más pesadas o tienen un cuerpo más grande. Esto se debe a que, en general, las mujeres más delgadas tienen menos masa ósea en comparación con las mujeres más grandes. Lo mismo ocurre con los hombres.

Densidad ósea existente

Cuando llegas a la menopausia, cuanto mayor es tu densidad ósea, menor es tu probabilidad de desarrollar osteoporosis.

Piensa en tu cuerpo como un banco. Pasas tu vida de joven construyendo o “ahorrando” masa ósea. Cuanta más masa ósea tengas al comienzo de la menopausia, menos rápidamente se “agotará”.

Es por eso que, debes alentar a tus hijos a desarrollar activamente la densidad ósea en su juventud.

Antecedentes familiares

Si tus padres o abuelos tuvieron osteoporosis o una fractura de cadera como resultado de una caída leve, es posible que tengas un mayor riesgo de desarrollar osteoporosis.

Sexo biológico

Las mujeres tienen hasta cuatro veces más probabilidades de desarrollar osteoporosis que los hombres. Esto se debe a que las mujeres tienden a ser más pequeñas y suelen pesar menos que los hombres. Las mujeres mayores de 50 años tienen el mayor riesgo de desarrollar la enfermedad ósea.

Raza y etnia

A nivel mundial, los europeos del norte y los caucásicos tienen el mayor riesgo de fractura debido a la osteoporosis. La osteoporosis también está disminuyendo en esta población.

Sin embargo, el estudio de observación “Iniciativa para la salud de la mujer” mostró que hubo más fracturas por osteoporosis en mujeres afroamericanas, nativas americanas, asiáticas e hispanas que casos de cáncer de mama invasivo, accidente cerebrovascular y muerte por ataque cardíaco combinados en esta misma población.

Una variedad de tratamientos puede ayudar a detener el desarrollo de la osteoporosis. A continuación, se indican algunos pasos que puedes seguir para prevenir el deterioro de los huesos:

Toma suplementos de calcio y vitamina D

El calcio puede ayudar a desarrollar huesos fuertes y mantenerlos fuertes a medida que envejeces. Los National Institutes of Health (NIH, siglas en inglés para denotar Institutos Nacionales de Salud) recomiendan que las personas de 19 a 50 años consuman 1,000 miligramos (mg) de calcio al día.

Las mujeres mayores de 50 años y todos los adultos mayores de 70 deben consumir al menos 1,200 mg de calcio al día.

Si no puedes obtener el calcio adecuado a través de fuentes alimenticias como productos lácteos, col rizada y brócoli, habla con tu médico sobre los suplementos. Tanto el carbonato de calcio como el citrato de calcio proporcionan buenas formas de calcio a tu cuerpo.

La vitamina D es importante para la salud de los huesos, ya que tu cuerpo no puede absorber el calcio adecuadamente sin ella. Los pescados grasos como el salmón o la macarela son buenas fuentes de vitamina D de los alimentos, junto con alimentos como la leche y los cereales a los que se agrega vitamina D.

La exposición al sol es la forma natural en que el cuerpo produce vitamina D. Pero el tiempo que tarda el sol en producir vitamina D varía según la hora del día, el medio ambiente, el lugar donde vives y el pigmento natural de tu piel.

Para las personas preocupadas por el cáncer de piel o para quienes desean obtener su vitamina D de otras formas, hay suplementos disponibles.

Según los NIH, las personas de 19 a 70 años deben consumir al menos 600 unidades internacionales (UI) de vitamina D todos los días. Las personas mayores de 70 años deben aumentar su vitamina D diaria a 800 UI.

Pregúntale a tu médico sobre medicamentos recetados y agentes inyectables para la formación de huesos

Un grupo de medicamentos llamados bisfosfonatos ayuda a prevenir la pérdida de masa ósea. Con el tiempo, se ha demostrado que estos medicamentos retrasan la pérdida ósea, aumentan la densidad ósea y reducen el riesgo de fracturas de huesos.

Un estudio de 2017 mostró que los bifosfonatos pueden reducir la tasa de fracturas debido a la osteoporosis hasta en 60 por ciento.

Los anticuerpos monoclonales también se pueden usar para ayudar a prevenir la pérdida ósea. Estos medicamentos incluyen denosumab y romosozumab (Evenity).

Los moduladores selectivos del receptor de estrógeno, o SERM, son un grupo de medicamentos que tienen propiedades similares al estrógeno. A veces, se utilizan para la prevención y el tratamiento de la osteoporosis.

Un estudio de 2016 mostró que el mayor beneficio de los SERM suele ser reducir el riesgo de fracturas en la columna hasta en 42 por ciento.

Haz que el ejercicio con pesas forme parte de tu rutina de ejercicios

El ejercicio a menudo hace tanto para construir y mantener huesos fuertes como los medicamentos. Fortalece los huesos, ayuda a prevenir la pérdida ósea y también acelera la recuperación en caso de una fractura de huesos.

Caminar, trotar, bailar y hacer aeróbicos son buenas formas de ejercicio con peso. Un estudio de 2017 indica que la natación y los ejercicios acuáticos también brindan algún beneficio a la fuerza ósea, pero no tanto en comparación con las actividades con peso.

Habla con tu médico sobre la terapia de reemplazo hormonal

La terapia de reemplazo hormonal (TRH) puede ayudar a prevenir la pérdida ósea causada por la disminución de los niveles de estrógeno que ocurre durante la perimenopausia y la menopausia. Sin embargo, expertos recomiendan actualmente que la TRH se utilice solo después de que se hayan considerado otras opciones para la salud ósea.

La TRH puede tener un papel en el tratamiento de otros síntomas de la menopausia, incluidos los sofocos, los sudores nocturnos y los cambios de humor. Sin embargo, esta terapia no es para todos. Es posible que no sea la opción de tratamiento correcta si tienes antecedentes personales o tienes un mayor riesgo de:

  • ataque cardíaco
  • accidente cerebrovascular
  • coágulos de sangre
  • cáncer de mama

También existen otras afecciones médicas en las que la TRH no es la mejor opción. Habla con tu médico para obtener más información sobre esta opción de tratamiento.

Las personas que atraviesan la menopausia tienen un mayor riesgo de desarrollar osteoporosis, pero hay muchas formas de retrasarla y fortalecer tu cuerpo para prevenirla.

Lee el artículo en inglés.