Poco menos de 1.2 millones de personas en Estados Unidos se contagiaron de VIH en 2019, según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés). El 13 por ciento no lo supo.

El VIH es más frecuente que la media en los hombres que tienen relaciones sexuales con hombres (HSH). En 2019, el 65 por ciento de los nuevos diagnósticos de VIH fue en hombres homosexuales, bisexuales u otros HSH, según los CDC.

A continuación, explicamos por qué los HSH tienen un mayor riesgo de contraer VIH, así como las medidas para prevenir la transmisión.

En todo el mundo, los HSH tienen 25 veces más probabilidades que la media de contraer VIH, informa ONUSIDA.

En Estados Unidos, los hombres homosexuales, bisexuales y otros HSH representan la mayoría de los nuevos diagnósticos de VIH.

Dado que el VIH es más común entre los HSH, estos hombres tienen más probabilidades de mantener relaciones sexuales con alguien que porta el virus.

Varios otros factores también aumentan las posibilidades de transmisión entre los HSH.

El VIH puede transmitirse a través del contacto con:

  • sangre
  • semen (incluidos los fluidos preseminales, también conocidos como “preeyacular” o “precum”)
  • fluidos vaginales
  • leche materna que contiene el virus

Algunas personas contraen el virus cuando tienen relaciones sexuales sin preservativo ni otro método de barrera. Sin embargo, esta no es la única forma de contraer VIH.

El virus puede transmitirse cuando una persona seropositiva comparte agujas, jeringas u otro equipo para el consumo de drogas con otra persona.

El VIH también puede transmitirse de madre a hijo durante el embarazo, el parto o la lactancia.

Algunas personas han contraído VIH tras una transfusión de sangre o el trasplante de un órgano que contenía el virus. Pero, como la sangre y los órganos de los donantes se analizan rutinariamente para detectar el VIH desde 1985, la posibilidad de que esto ocurra hoy es muy baja.

El VIH afecta de forma desproporcionada a determinadas poblaciones de HSH.

Entre los HSH, los hombres negros e hispanos (que pueden ser de cualquier raza) corren más riesgo de contraer el virus que los blancos no hispanos, informan los CDC.

Esto podría deberse a que, según un informe de 2017, los hombres homosexuales y bisexuales negros e hispanos son menos propensos a tomar la medicación preventiva.

Las razones de esto incluyen el estigma que rodea a las experiencias del mismo sexo y el estrés de soportar el racismo, la discriminación y los sistemas racistas que juegan un papel en las desigualdades de la atención médica.

Además, el VIH tiende a afectar a las personas de comunidades con pocos recursos y con menos acceso a la atención preventiva del virus.

En la actualidad, aunque muchas naciones tienen políticas más progresistas, algunas zonas de África, Rusia y Medio Oriente siguen aplicando leyes contra la actividad sexual entre personas del mismo sexo. Esto bloquea el acceso a la atención preventiva del VIH para estas personas.

El estigma desempeña un papel importante en la transmisión del VIH, a pesar de los avances en la prevención y el tratamiento.

Incluso en lugares en los que la actividad sexual entre personas del mismo sexo es legal, el miedo al estigma y la discriminación que esto conlleva puede llevar a los hombres a ocultar su identidad sexual a los profesionales médicos. Esto crea una barrera para las pruebas y el tratamiento preventivo.

El estigma asociado al VIH también puede impedir que las personas que conocen su estatus seropositivo accedan y mantengan el tratamiento para suprimir su carga viral y ayudar a detener la propagación.

Como resultado, el estigma impulsa aún más la transmisión del VIH en la comunidad de HSH.

El VIH puede transmitirse a través de las relaciones sexuales sin preservativo ni otro método de barrera.

La probabilidad de transmisión es mayor durante el sexo anal sin condón u otro método de barrera que durante el sexo vaginal sin condón u otro método de barrera.

Esto se debe a que la piel que rodea el ano es más fina que la de la vagina, por lo que es más probable que se produzcan pequeños desgarros durante el sexo anal.

Una persona sin VIH tiene más probabilidades de contraer el virus durante el sexo anal si es la pareja “receptiva” (la pareja cuyo ano está siendo penetrado por el pene).

El diagnóstico y el tratamiento tempranos del VIH son importantes. El tratamiento con antirretrovirales previene la progresión al SIDA. También puede reducir el virus hasta niveles indetectables, que es cuando ya no puede transmitirse a otras personas.

Los CDC recomiendan que los HSH se hagan la prueba del VIH al menos una vez al año. Las personas con mayor riesgo de contraer VIH pueden beneficiarse de pruebas más frecuentes, como cada 3 a 6 meses.

No todos los HSH siguen estas recomendaciones. Como resultado, algunos pueden tener VIH sin saberlo. Esto puede provocar retrasos en el tratamiento y aumentar las posibilidades de transmisión.

En 2018, aproximadamente 1 de cada 6 HSH con VIH en Estados Unidos no sabía que tenía el virus, informan los CDC. En ese mismo año, según los CDC, solo 65 de cada 100 hombres homosexuales y bisexuales con VIH en Estados Unidos recibieron algún tipo de atención para la infección.

Algunos HSH no buscan pruebas o tratamiento debido al estigma homofóbico, o por miedo a la discriminación.

Existen medicamentos para reducir la probabilidad de contraer el VIH.

Entre estos se encuentran la profilaxis previa a la exposición (PrEP) y la profilaxis posterior a la exposición (PEP).

Si una persona que no tiene VIH tiene un mayor riesgo de contraer el virus, tomar la PrEP a diario reduce significativamente este riesgo.

Si una persona que no tiene VIH tiene una posible exposición al virus, puede tomar la PEP en un plazo de 72 horas. Esto reduce en gran medida el riesgo de transmisión.

A pesar de la disponibilidad de estos medicamentos, su uso sigue siendo escaso entre los hombres homosexuales y bisexuales, especialmente los negros o hispanos, según los CDC.

En 2017, los CDC informan que los siguientes grupos tomaron la PrEP:

  • 19 por ciento de los HSH negros o afroamericanos
  • 21 por ciento de los HSH hispanos
  • 31 por ciento de los HSH blancos no hispanos

La atención médica puede ser limitada para algunas personas, ya que no todos tienen acceso. Incluso para aquellos con acceso, no todos los profesionales médicos se sienten cómodos recetando estos medicamentos.

El VIH se puede prevenir. Hay algunas formas de reducir el riesgo de transmisión.

1. Usa un método de protección durante las relaciones sexuales

Los preservativos y otros métodos de barrera pueden proteger contra el VIH y otras infecciones de transmisión sexual (ITS).

Si tienes VIH u otra ITS, recibir tratamiento y utilizar un preservativo u otro método de barrera cada vez que tengas relaciones sexuales puede reducir el riesgo de transmisión.

Si no tienes una ITS, puedes protegerte de adquirir una utilizando un preservativo u otro método de barrera cada vez que tengas relaciones sexuales.

Además, es importante comprar el preservativo del tamaño adecuado para ti y utilizarlo correctamente.

2. Elige actividades sexuales alternativas

Algunas actividades conllevan un mayor riesgo de transmisión de VIH que otras.

La probabilidad de transmisión es alta durante el sexo anal sin preservativo u otro método de barrera.

La probabilidad de transmisión es baja durante el sexo oral o las actividades que no implican el contacto con fluidos corporales.

3. Limita el número de parejas sexuales

La probabilidad de transmisión de VIH aumenta con el número de parejas sexuales que tiene una persona.

4. Consigue pruebas y tratamiento

Si eres un HSH, considera la posibilidad de hacerte la prueba de VIH al menos una vez al año. Las personas que mantienen relaciones sexuales con múltiples parejas o con parejas de las que se desconoce el estatus de VIH deberían considerar la posibilidad de hacerse pruebas con mayor frecuencia, por ejemplo, cada 3 o 6 meses.

Las personas que dan positivo en la prueba de VIH deben seguir el plan de tratamiento que su médico les recomiende. Tomar la medicación antirretroviral reducirá el riesgo de complicaciones, y ayudará a prevenir la transmisión del VIH.

También es útil preguntar a las parejas sexuales sobre su historial de pruebas y su estatus.

5. Toma la PrEP o PEP

Si no tienes VIH, pregunta a tu médico si deberías tomar la PrEP para reducir la posibilidad de contraer el virus.

Si tienes relaciones sexuales sin preservativo ni otro método de barrera con alguien que tiene VIH o con alguien que podría tenerlo, pregunta a tu médico sobre la PPE. Debes tomar la PEP en las 72 horas siguientes a la posible exposición, y seguir tomándola durante 28 días.

Las personas que tienen VIH deberían animar a sus parejas a hablar con un médico sobre la PrEP y la PEP.

Cada año ocurren nuevas infecciones por VIH, y un gran número de ellas afecta a los HSH.

Reduce tus posibilidades de contraer o transmitir el virus utilizando un preservativo u otro método de barrera durante las relaciones sexuales. Hazte la prueba de VIH con regularidad, y habla con tus parejas sexuales sobre su estatus serológico.

Hay medicamentos antirretrovirales para tratar el VIH. Ayudan a prevenir la transmisión y a reducir el riesgo de complicaciones del VIH.

También hay medicamentos para reducir las posibilidades de que alguien sin VIH contraiga el virus tras la exposición.

Lee el artículo en inglés.

Traducción al español por HolaDoctor.

Edición en español el 7 de marzo de 2022.

Versión original actualizada el 28 de septiembre de 2021.

Última revisión médica realizada el 17 de septiembre de 2021.