Notarás que tu respiración se acelera cada vez que haces ejercicio o subes un tramo de escaleras. Respiras más fuerte porque la necesidad que tiene tu cuerpo de oxígeno aumenta con el esfuerzo.

La respiración acelerada cuando no te estás moviendo es una señal de que tu cuerpo tiene que trabajar más fuerte para recibir suficiente oxígeno. Esto se puede deber a que entra menos aire a través de tu nariz y boca o muy poco oxígeno ingresa a tu torrente sanguíneo. Desde una nariz congestionada hasta un trastorno pulmonar, como la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), pueden dificultar más tu respiración.

Lee para saber más sobre las causas de la respiración acelerada y cómo tratar este síntoma.

Para comprender qué causa la respiración acelerada, necesitas saber cómo funciona la respiración. La respiración es un esfuerzo coordinado que incluye tu nariz, boca y pulmones. Cuando inhalas, el aire entra a través de tu nariz y boca, y llega a los pulmones. Este entra a los sacos de aire parecidos a unos globos llamados alvéolos. Desde allí, el oxígeno pasa al torrente sanguíneo para ser transportado a tu cuerpo.

A continuación, encontrarás algunas posibles causas de la respiración acelerada.

Resfriados y problemas de los senos nasales

Los virus y las bacterias pueden obstruir tus vías nasales, lo que hace más difícil llevar suficiente oxígeno a tus vías respiratorias. Los resfriados aumentan la cantidad de mucosidad que produce tu cuerpo. Las infecciones de los senos nasales causan inflamación en los senos nasales, los espacios llenos de aire detrás de tu nariz y mejillas.

Otros síntomas de un resfriado incluyen:

  • secreción nasal
  • estornudos
  • tos
  • dolor de garganta
  • dolor de cabeza o dolor de cuerpo
  • fiebre baja

Otros síntomas de una infección en los senos nasales incluyen:

  • secreción nasal que puede ser verde
  • dolor o sensibilidad en tu cara
  • dolores de cabeza
  • tos
  • fiebre
  • fatiga
  • mal aliento

Las infecciones causadas por virus desaparecerán por sí solas con el tiempo. Las infecciones de los senos nasales causadas por las bacterias se tratan con antibióticos.

Alergias

Las alergias son una reacción exagerada de tu sistema inmunitario a las sustancias normalmente inofensivas en tu entorno, como el polen, el césped o la caspa de las mascotas. Cuando tu sistema inmunitario reacciona, activa tu cuerpo para liberar la histamina química. Si no estás familiarizado con los síntomas de una alergia, puedes pensar que estás empezando con un resfriado. Una reacción alérgica causa síntomas como estos:

  • estornudos
  • nariz congestionada y con secreción
  • ojos llorosos
  • urticaria, erupción
  • náusea
  • diarrea

La forma más seria de una reacción alérgica se llama anafilaxis. Esta hace que tu garganta y boca se inflamen, lo que dificulta respirar.

Asma

El asma es una afección crónica en la que las vías respiratorias en tus pulmones se inflaman. Esta inflamación dificulta que el aire llegue a tus pulmones.

Otros síntomas incluyen:

  • sibilancias
  • tos
  • dificultad para respirar
  • sensación de presión en tu pecho

Puedes tomar medicamentos para el asma a diario o durante los ataques para abrir tus vías respiratorias y facilitar tu respiración.

Infecciones respiratorias

La neumonía, la bronquitis y la tuberculosis son infecciones pulmonares causadas por bacterias o virus. Otros síntomas de estas infecciones incluyen:

  • tos que puede causar mucosidad transparente o con manchas de sangre
  • fiebre
  • escalofríos
  • fatiga
  • dolor de cabeza
  • molestias en el pecho
  • pérdida del apetito

Las infecciones bacterianas se tratan con antibióticos. Los virus con frecuencia desaparecen solos en una o dos semanas.

Ansiedad

Algunas veces, la causa de la dificultad respiratoria no es física, sino psicológica. Cuando estás ansioso, tu cuerpo se tensa y empiezas a respirar más rápido, entre otros efectos. Esta respiración acelerada y rápida también se llama hiperventilación. También podrías sentir dolor en el pecho, que fácilmente se puede confundir con un ataque cardíaco.

Otros síntomas de ansiedad incluyen:

  • ritmo cardíaco acelerado
  • mareos
  • sudoración excesiva
  • temblores
  • sensación de agitación en tu estómago
  • diarrea

Puedes tratar la ansiedad con ejercicios de relajación, terapia y ansiolíticos.

Obesidad

Cargar mucho peso extra causa presión en tus pulmones, lo que hace que trabajen más fuerte para expandirse. Si tienes un Índice de Masa Corporal (IMC) de 30 o más, el número que define la obesidad, podrías tener más problemas para respirar, especialmente cuando haces ejercicio.

La obesidad también puede causar:

  • problemas cardíacos
  • diabetes
  • apnea del sueño
  • otras afecciones médicas

Pérdida de peso, idealmente con dieta y ejercicios, es la mejor manera de combatir los problemas médicos relacionados con la obesidad.

Enfermedad pulmonar obstructiva crónica

La enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) es un grupo de enfermedades pulmonares, incluyendo bronquitis crónica, enfisema y asma, que dificultan respirar. Con frecuencia causadas por daños pulmonares relacionados con fumar.

Los síntomas de la EPOC incluyen:

  • tos crónica
  • dificultad para respirar
  • fatiga
  • mayor producción de mucosidad
  • sibilancias

Los medicamentos, la rehabilitación pulmonar y el oxígeno complementario pueden ayudarte a manejar estos síntomas.

Insuficiencia cardíaca

Puedes tener insuficiencia cardiaca cuando una afección como la enfermedad de arterias coronarias o un ataque cardíaco dañan tu corazón hasta el punto en el que no puede bombear sangre efectivamente hacia tu cuerpo. La dificultad para respirar es causada cuando la sangre regresa hacia los vasos sanguíneos y el líquido se filtra hacia tus pulmones.

Otros síntomas de insuficiencia cardíaca incluyen:

  • dolor en el pecho
  • ritmo cardíaco rápido (palpitaciones)
  • tos
  • mareos
  • hinchazón en tus piernas o tobillos
  • aumento rápido de peso

Los medicamentos, los dispositivos implantables y la cirugía son tratamientos para tratar la insuficiencia cardíaca.

Cáncer de pulmón

La dificultad para respirar y la falta de aliento pueden ser síntomas del cáncer de pulmón, especialmente en las últimas etapas de la enfermedad.

Otros síntomas incluyen:

  • tos
  • dolor de pecho
  • aumento en la producción de flema
  • ronquera
  • toser sangre

Cuán tratable es el cáncer dependerá de su etapa, la que se determina por el tamaño del tumor y si este se ha propagado.

Es posible que no notes la respiración acelerada si aparece mientras estás durmiendo. Es posible que tu pareja tenga que avisarte que estás haciendo mucho ruido cuando respiras.

Una causa común de la respiración acelerada durante la noche es la apnea obstructiva del sueño. En esta afección, los músculos de tu garganta se relajan y bloquean la abertura hacia tus vías respiratorias. Este bloqueo detiene repetidamente tu respiración durante la noche.

Otras señales de que tienes apnea del sueño incluyen:

  • ronquido fuerte
  • dolores de cabeza matutinos
  • somnolencia durante el día
  • irritabilidad
  • problemas para recordar cosas o concentrarte

Uno de los principales tratamientos para la apnea del sueño es la presión positiva continua en las vías respiratorias (CPAP, en inglés). Se usa un dispositivo que consta de una mascarilla que sopla aire hacia tus vías respiratorias mientras duermes. También puedes probar un aparato oral para sostener tu mandíbula en la posición correcta durante la noche.

Otras causas de la respiración acelerada mientras duermes incluyen:

  • congestión nasal debido a un resfriado o infección respiratoria
  • EPOC
  • insuficiencia cardíaca
  • obesidad

Consulta con tu médico si tu respiración se acelera y no desaparece sola en una o dos semanas. Llama de inmediato para pedir ayuda si tienes estos síntomas, que podrían indicar una emergencia médica:

  • problemas para respirar
  • dolor en el pecho y opresión
  • sangre en la flema
  • inflamación en tu boca o rigidez en tu garganta
  • mareos, debilidad

El tratamiento para la respiración acelerada depende de la causa.

Para las afecciones pulmonares como el asma y la EPOC, los tratamientos incluyen:

  • medicamentos como broncodilatadores y corticosteroides para reducir la inflamación y abrir las vías respiratorias
  • rehabilitación pulmonar, que es un programa que combina la terapia de ejercicios, consejo nutricional y educación
  • terapia de oxígeno

Para los resfriados, las infecciones de los senos nasales y las infecciones respiratorias, los tratamientos incluyen:

  • antibióticos, si las bacterias causaron la infección (estos medicamentos no ayudarán con las infecciones virales)
  • descongestivos nasales o aerosoles con esteroides para reducir la inflamación de las vías nasales
  • antihistamínicos para reducir la inflamación en las vías nasales

Para la insuficiencia cardíaca, los tratamientos incluyen:

  • medicamentos como diuréticos, vasodilatadores, betabloqueantes e inhibidores de la ECA
  • marcapasos, desfibrilador cardioversor implantable, dispositivo de asistencia ventricular izquierda y otros dispositivos implantables
  • injerto de derivación de las arterias coronarias, cirugía de las válvulas y otros procedimientos

Para el cáncer de pulmón, los tratamientos incluyen:

  • cirugía para extirpar el tumor o pulmón
  • quimioterapia
  • radiación
  • inmunoterapia

Algunas causas de la respiración acelerada, como la obesidad y apnea del sueño, pueden prevenirse. Es posible que sea más difícil que puedas controlar otras causas, como las infecciones.

A continuación, encontrarás algunas cosas que puedes hacer para evitar la respiración acelerada:

  • Mantén un peso saludable.
  • Lávate las manos con frecuencia y evita estar cerca de personas enfermas, para que no contraigas una infección.
  • Si fumas, obtén ayuda con tu médico para dejar de fumar.
  • Si tienes alergias, consulta con un otorrinolaringólogo o alergólogo para obtener vacunas contra las alergias.

Lee el artículo en inglés.