Para muchas personas con colitis ulcerosa, encontrar el plan de dieta adecuado es un proceso de eliminación. Eliminas ciertos alimentos que parecen agravar tus síntomas, y luego ves cómo te sientes.
No se ha demostrado que alguna dieta ayude con la colitis ulcerosa, pero algunos planes de alimentación podrían ayudar a algunas personas enfermas a mantener sus síntomas bajo control.
El “residuo” en el nombre de esta dieta se refiere a los alimentos que tu cuerpo no puede digerir bien y que terminan en las heces. A veces, se utiliza indistintamente con el término “dieta baja en fibra”.
La dieta baja en residuos es baja en fibra, pero ambos no son exactamente la misma cosa.
Los alimentos bajos en fibra son fáciles de digerir para el cuerpo. Pueden ayudar a disminuir las evacuaciones intestinales y limitar la diarrea. Todavía puedes comer muchos de los alimentos que normalmente comerías, al mismo tiempo que mantienes tu consumo de fibra bajo, en alrededor de 10 a 15 gramos al día.
Tu cuerpo aún obtendrá suficientes proteínas, minerales, líquidos y sal. Pero dado que la diarrea crónica y el sangrado rectal pueden conducir a deficiencias de nutrientes y minerales, es posible que tu médico te indique que agregues un multivitamínico u otro suplemento a tu dieta.
Lo que puedes comer en una dieta baja en residuos:
- leche, queso cottage, pudín o yogur
- panes blancos refinados, pasta, galletas saladas y cereales secos que tengan menos de 1/2 gramo de fibra por porción
- carnes cocidas blandas y tiernas, como aves de corral, huevos, cerdo y pescado
- mantequilla ligera de maní y nuez
- jugos de frutas sin pulpa
- conservas de frutas y puré de manzana, sin incluir la piña
- bananas crudas y maduras, melón, melón cantalupo, sandía, ciruelas, melocotones y albaricoques
- lechuga cruda, pepino, calabacín y cebolla
- espinacas cocidas, calabaza, calabaza amarilla sin semillas, zanahorias, berenjenas, papas, judías verdes y chauchas amarillas
- mantequilla, margarina, mayonesa, aceites, salsas suaves y aderezos (sin tomate), crema batida y condimentos suaves
- tortas sencillas, galletas, pasteles y gelatina
Qué no puedes comer:
- embutidos
- frutos secos
- bayas, higos, ciruelas y jugo de ciruelas
- vegetales crudos no incluidos en la lista anterior
- salsas picantes, aderezos, encurtidos y condimentos con trozos
- nueces, semillas y palomitas de maíz
- alimentos y bebidas que contienen cafeína, cacao y alcohol
La dieta paleolítica, o dieta paleo como se la conoce comúnmente, hace retroceder la dieta humana unos miles de años.
Su premisa es que nuestros cuerpos no fueron diseñados para comer una dieta moderna basada en granos, y que seríamos más saludables si comiéramos más como nuestros antepasados cavernícolas cazadores y recolectores.
Esta dieta es alta en carne magra, que representa al menos el 30 por ciento de su total calórico diario. La fibra en la dieta proviene de frutas, raíces, legumbres y nueces, más que de granos.
Esto puedes comer en una dieta paleolítica:
- frutas
- la mayoría de los vegetales
- carne vacuna magra de animales alimentados con pasto
- pollo y pavo
- carnes de caza
- huevos
- pescado
- nueces
- miel
Qué no puedes comer:
- papas
- legumbres
- granos de cereal
- lácteos
- sodas
- azúcar refinada
Aunque algunas personas afirman que se sienten mejor con una dieta paleolítica, no hay evidencia de ensayos clínicos de su beneficio para la enfermedad inflamatoria intestinal (EII). Además, esta dieta puede llevar a la deficiencia de vitamina D y otras carencias de nutrientes.
Si deseas probarla, pregúntale a tu médico si necesitarás tomar un suplemento.
Esta dieta se desarrolló originalmente para tratar la enfermedad celíaca, pero desde entonces se ha promovido para otros problemas gastrointestinales. La idea detrás de esto es que los intestinos no digieren o usan ciertos granos y azúcares muy bien.
Comer alimentos que contienen estos ingredientes permite que las bacterias en el intestino se multipliquen demasiado rápido, lo que conduce a la producción excesiva de mucosidad. Esto contribuye al ciclo de daño intestinal que produce síntomas de colitis ulcerosa.
Qué puedes comer en la dieta de carbohidratos específicos:
- la mayoría de frutas y vegetales
- nueces y harinas de nueces
- leche y otros productos lácteos que son bajos en lactosa de azúcar
- carne
- huevos
- mantequilla
- aceites
Qué no puedes comer:
- papas
- legumbres
- carnes procesadas
- granos
- soja
- leche
- azúcar de mesa
- chocolate
- jarabe de maíz
- margarina
Hay cierta evidencia de que esta dieta podría mejorar los síntomas de la colitis ulcerosa. Sin embargo, es posible que necesites modificarla dependiendo de tus síntomas.
Por ejemplo, las frutas, los vegetales crudos y los huevos podrían empeorar la diarrea cuando experimentas un brote.
Esta dieta también puede dejarte con poca cantidad de ciertos nutrientes, incluyendo vitaminas del grupo B, calcio, vitamina D y vitamina E. Pregúntale a tu médico si necesitarás tomar suplementos si sigues la dieta de carbohidratos específicos.
La dieta baja en FODMAP es similar a la dieta de carbohidratos específicos. Ambas dietas siguen la premisa de que los carbohidratos y el azúcar mal absorbidos en el intestino provocan un exceso de crecimiento de bacterias, y síntomas de colitis ulcerosa.
Sin embargo, los componentes de esta dieta son ligeramente diferentes.
Qué puedes comer con la dieta baja en FODMAP:
- bananas, arándanos, pomelo, melaza
- zanahorias, apio, maíz, berenjena, lechuga
- todas las carnes y otras fuentes de proteínas
- nueces
- arroz, avena
- queso duro
- miel de maple
Qué no puedes comer:
- manzanas, albaricoques, cerezas, peras, sandía
- coles de Bruselas, repollo, legumbres, cebollas, alcachofas, ajo, puerros
- trigo, centeno
- leche, yogur, queso suave, helado
- edulcorantes
- jarabe de maíz con alta fructuosa
Si bien la dieta baja en FODMAP puede mejorar los síntomas como gases e hinchazón, no reducirá la inflamación ni evitará daños en el tracto gastrointestinal.
Si quieres probar esta dieta, pídele a un dietista que te ayude a averiguar qué azúcares empeoran tus síntomas y cuáles aún puedes comer.
El gluten es una proteína que se encuentra en granos como el trigo, el centeno y la cebada. Algunas personas con EII descubren que eliminar el gluten mejora sus síntomas, aunque no hay evidencia de que esta dieta retrase el daño gastrointestinal.
Lo que se puede comer en la dieta sin gluten:
- frutas y vegetales
- frijoles, semillas y legumbres
- huevos, pescado, aves y carne
- la mayoría de los productos lácteos bajos en grasa
- granos como quinoa, maíz, trigo sarraceno, lino y amaranto
Qué no puedes comer:
- trigo, cebada, centeno y avena
- productos procesados como cerveza, pasteles, pan, pastas y salsas elaboradas con estos granos
La dieta mediterránea incluye frutas y vegetales, aves, pescado, lácteos, granos integrales, nueces, semillas, aceite de oliva y vino tinto. La carne roja se incluye solo en pequeñas cantidades.
Si bien la dieta mediterránea no ha sido bien estudiada en personas con colitis ulcerosa, se ha demostrado que reduce la inflamación en general.
Científicos están investigando qué tanto se parece a la dieta de carbohidratos específicos para el tratamiento de la EII.
Qué puedes comer en la dieta mediterránea:
- frutas
- vegetales y legumbres
- nueces y semillas
- granos integrales
- pescado
- aves de corral
- productos lácteos
- huevos
- aceite de oliva y otras grasas saludables
Esta dieta realmente no restringe ningún alimento, aunque incluye carne roja solo en cantidades limitadas.
Tus necesidades dietéticas pueden cambiar cuando experimentas un brote. En general, los mejores alimentos para las personas con esta afección incluyen:
- la mayoría de frutas y vegetales
- fuentes de proteínas magras como pescado, pollo, cerdo magro, huevos y tofu
- cereales y otros granos
Ciertos alimentos pueden agravar tus síntomas, incluidos los siguientes:
- frutas con semillas y piel
- productos lácteos
- alimentos picantes
- cafeína
- nueces
- alcohol
Cada cuerpo es diferente, por lo que es posible que dos personas que tienen colitis ulcerosa tengan diferentes alimentos desencadenantes.
Registrar lo que comes durante el día y cuándo se producen los problemas digestivos puede ayudarte a ti y a tu médico a reducir tus desencadenantes de alimentos. Esto puede ser especialmente útil si estás probando una nueva dieta.
Crear una dieta para la colitis ulcerosa no es una solución para todos. Tus necesidades y restricciones dietéticas cambiarán a medida que tus síntomas aparecen y desaparecen.
Para asegurarte de consumir el balance adecuado de nutrientes y no agravar tu condición, habla con un dietista. Es posible que necesites llevar un diario de alimentos para determinar cuáles no puedes tolerar.