Si tienes artritis psoriásica (AP), posiblemente estés familiarizado con la inflamación de articulaciones y el dolor que causa. Sin embargo, ¿sabías que algunas personas con AP también desarrollan inflamación en los ojos?
La inflamación es la hinchazón que puede desarrollarse en varias partes de tu cuerpo como resultado de una respuesta inmunitaria. Es una respuesta normal y saludable a una lesión o infección que debería detenerse cuando tu cuerpo empieza el proceso de curación.
Sin embargo, en condiciones inflamatorias como una psoriasis, y la AP, el sistema inmunitario ataca las partes saludables de tu cuerpo. Esto hace que ocurra la inflamación crónica.
En algunos casos, puedes desarrollar inflamación en los ojos. Esto puede causar síntomas molestos. En casos graves, puede provocar la pérdida de la vista.
Lee para conocer sobre algunos de los síntomas y afecciones oculares que pueden afectar a las personas con AP.
Las personas con AP pueden desarrollar afecciones oculares que causan síntomas como:
- ojos rojos
- picazón en los ojos
- ojos secos o sensación de arena en los ojos
- dificultad para enfocar o visión borrosa
- dolor o sensibilidad, especialmente en reacción a la luz brillante
Algunas veces, estos síntomas son causados por la inflamación relacionada con la AP. En otros casos, los síntomas oculares podrían resultar de una afección ocular u otra causa no relacionada con la AP.
Si desarrollas partículas flotantes grandes y luces titilantes en tu campo visual, puede ser una señal de una emergencia médica que requiere tratamiento inmediato. Las partículas flotantes son pequeñas manchas, líneas u otras formas que se mueven en el campo de visión.
Usualmente, las superficies de tus ojos se recubren con una capa delgada de lágrimas cada vez que parpadeas. Esta película de lágrimas está hecha de capas de agua, aceite y mucosidad.
Si tus ojos no producen suficientes lágrimas o la clase correcta de lágrimas, esto causa ojos secos. Esto puede hacer que parpadear sea irritante para tus ojos.
Los síntomas usuales de los ojos secos incluyen:
- enrojecimiento
- ardor o picazón en los ojos
- sensación áspera o de irritación en los ojos
- sensación de arena en los ojos
- mucosidad fibrosa en los ojos
- visión borrosa
- dificultad para leer
En algunos casos, los ojos secos se pueden desarrollar sin síntomas notables. Esto puede suceder en una afección conocida como el síndrome de Sjögren, que afecta a algunas personas con AP.
Si desarrollas ojos secos, el plan de tratamiento recomendado por tu médico dependerá de la gravedad o la causa.
El tratamiento puede incluir:
- compresas tibias
- gotas lubricantes (“lágrimas artificiales”) para los ojos de venta libre (OTC, en inglés)
- gotas para los ojos con receta para disminuir la inflamación
- medicamentos orales con receta para incrementar tu producción de lágrimas
- cápsulas de silicón o gel para bloquear tus ductos lagrimales y mantener las lágrimas más tiempo en tus ojos
La uveítis es una afección en la que ocurre inflamación en la úvea de tu ojo.
La úvea es la capa media de tu ojo. Esta incluye tres partes:
- Iris. Esta es la parte con color en tu ojo. Controla la cantidad de luz que entra a tu ojo.
- Cuerpo ciliar. Esta parte ayuda a que tu ojo se enfoque.
- Coroides. Esta parte contiene muchos vasos sanguíneos que distribuyen nutrientes a tu ojo.
La uveítis puede afectar todo o parte de tu úvea. Por ejemplo, la uveítis anterior es un tipo de uveítis que afecta solo el iris. También se conoce como iritis. Esto ocurre cuando los glóbulos blancos se acumulan en la cámara anterior del ojo.
Las personas con AP tienen más probabilidad que el promedio de desarrollar uveítis.
Los síntomas de la uveítis incluyen:
- dolor ocular
- enrojecimiento de los ojos
- visión borrosa
- partículas flotantes en tu campo de visión
- sensibilidad a la luz
Si notas cualquiera de estos síntomas, es importante buscar atención médica de inmediato. Si la uveítis se diagnostica de manera temprana, existe tratamiento. Usualmente incluye medicamentos orales o gotas oculares para reducir el dolor o la inflamación.
Si no se trata eficazmente, la uveítis puede causar complicaciones como glaucoma, cataratas, daño al nervio óptico y pérdida permanente de la vista.
La conjuntivitis es una inflamación que ocurre en la conjuntiva del ojo. Algunas veces se conoce como ojo rosa, especialmente cuando es causada por una infección.
La conjuntiva es una capa delgada que cubre la esclerótica de tus ojos y el interior de tus pestañas. Cuando se inflaman, los bordes de la esclerótica de tus ojos se irritan y se ven rojos.
Los síntomas de la conjuntivitis incluyen:
- color rojo o rosado en la esclerótica de tu ojo
- sensación de picazón o ardor en tus ojos
- excesiva secreción pegajosa en tus ojos
- materia dura pegada en las pestañas de tus ojos después de dormir
La inflamación que se relaciona con la AP puede causar conjuntivitis. También puede ser causada por otras afecciones, como alergias o infecciones.
El tratamiento para la conjuntivitis depende de la causa. Si tu médico sospecha que tienes conjuntivitis causada por una infección bacteriana, puede recetarte gotas antibióticas para los ojos.
En otros casos, puede recomendar gotas lubricantes o esteroides para los ojos para reducir los síntomas hasta que la afección se solucione sola.
El ectropión ocurre cuando el párpado inferior se da vuelta hacia afuera.
Si tienes psoriasis en la piel al igual que AP, se pueden desarrollar parches escamosos en tu cara alrededor de los ojos y en tus párpados. Esto puede cambiar la forma de tus párpados. En algunos casos, puede causar ectropión.
Tus párpados ayudan a lubricar y proteger tus ojos. Si tus párpados se dan vuelta hacia afuera, puede causar irritación significativa en tu ojo.
Los síntomas del ectropión incluyen:
- caída visible de tu párpado inferior
- resequedad de los ojos
- exceso de lagrimeo
- sensación de picazón o arena en tus ojos
- sensibilidad al viento o luz brillante
A medida que envejeces, los tejidos y músculos alrededor de tus ojos se hacen menos elásticos y es más probable que se desarrolle el ectropión.
Para tratar el ectropión, tu médico puede realizar una cirugía para eliminar la piel adicional y dar forma nuevamente al párpado para que vuelva a su posición normal.
Si desarrollas síntomas de una afección ocular, el tratamiento recomendado dependerá de los síntomas específicos que tengas y su causa. El plan de tratamiento recomendado por tu médico se enfocará en aliviar tus síntomas, tratar la causa subyacente de tus síntomas o ambos.
Muchas afecciones de los ojos se tratan con gotas oculares. Dependiendo de tus síntomas o diagnóstico, tu médico puede recomendarte gotas oculares con esteroides, antibacterianas o lubricantes.
En algunos casos, tu médico puede recomendar medicamentos orales, cirugía o de otro tipo.
Si también experimentas un brote de síntomas de AP, tu médico puede recomendarte tratamientos para reducir la inflamación en todo tu cuerpo. Esto puede ayudar a aliviar la inflamación en tus articulaciones y ojos.
Si notas un cambio en tu visión o cómo se sienten tus ojos, es buena idea discutir estos cambios con tu médico u oftalmólogo.
El especialista puede ayudarte a identificar la causa de tus síntomas oculares. Es posible que los síntomas se puedan relacionar con la AP u otra afección médica.
Tu médico también puede ayudarte a desarrollar un plan de tratamiento para cualquier síntoma ocular que desarrolles. Dejar sin tratar una afección ocular puede ponerte en riesgo de complicaciones, incluyendo pérdida de la vista en casos graves.
Aunque la AP se relaciona principalmente con el dolor y la inflamación de las articulaciones, la inflamación también puede ocurrir en otras partes de tu cuerpo.
Esto puede ponerte en mayor riesgo de ciertas afecciones oculares, al igual que otras afecciones que incluyen inflamación, como síndrome de Sjögren.
Si desarrollas síntomas de inflamación u otros problemas en tus ojos, comunícate con tu médico u oftalmólogo. Pueden ayudarte a desarrollar un plan para aliviar los síntomas y mantener tus ojos saludables.