La ansiedad es una emoción humana normal caracterizada por una sensación de nerviosismo y preocupación. Puedes encontrarte experimentando ansiedad durante situaciones estresantes, como una primera cita o una entrevista de trabajo.

Algunas veces, sin embargo, la ansiedad puede permanecer por más tiempo de lo usual. Cuando esto sucede, puede interferir con tu vida diaria y nocturna.

Uno de los horarios más comunes en los que las personas experimentan ansiedad es en la noche. Muchos ensayos clínicos han determinado que la privación del sueño puede ser un desencadenante de la ansiedad. Históricamente, las investigaciones también sugieren que los trastornos de ansiedad están relacionados con la reducción de la calidad de sueño.

Tratar la ansiedad durante la noche y resolver tus problemas del sueño son pasos importantes para mejorar tu calidad de vida.

La ansiedad tiene muchos síntomas. Todos experimentan ansiedad de diferentes maneras. Los síntomas pueden aparecer en cualquier momento del día, en la mañana o en la noche. Los síntomas comunes de la ansiedad incluyen:

  • sensación de nerviosismo, intranquilidad o preocupación
  • problemas para concentrarte
  • problemas para conciliar el sueño o permanecer dormido
  • problemas gastrointestinales

Otro síntoma que una persona con ansiedad también puede experimentar son los ataques de pánico. Un ataque de pánico es un episodio de temor extremo e intenso, con frecuencia acompañado por manifestaciones físicas. Los síntomas comunes de un ataque de pánico incluyen:

  • una sensación de fatalidad inminente
  • ritmo cardíaco aumentado y dolor en el pecho
  • dificultad para respirar y estrechez de garganta
  • sudores, escalofríos y sofocos
  • mareos o aturdimiento
  • una sensación de disociación, o como que nada es real

En algunos casos, hasta puedes despertarte por un ataque de pánico nocturno. Los ataques de pánico (durante la noche) tienen las mismas señales y síntomas que los ataques de pánico regulares, solo que ocurren mientras estás durmiendo.

Si experimentas un ataque de pánico nocturno, puede ser difícil calmarte y volver a dormir.

Los problemas del sueño y la ansiedad parecen acompañarse mutuamente. La falta de sueño puede ser un desencadenante de la ansiedad, mientras que la ansiedad también puede causar falta de sueño.

Según la Asociación Estadounidense de Ansiedad y Depresión (ADAA, por sus siglas en inglés), más del 50 por ciento de los adultos dicen que sus niveles de ansiedad afectan su capacidad de dormir durante la noche.

Hay poca investigación científica sobre la ansiedad nocturna. Aun así, existen muchas razones por las que tu ansiedad puede empeorar durante la noche.

Puedes sentir que tu mente está acelerada y no puedes detener tus pensamientos. Puedes enfocarte en las preocupaciones del día o anticipar cosas de tu lista de pendientes para el siguiente día.

Este “estrés” percibido puede hacer que el cuerpo experimente una descarga de adrenalina, lo que vuelve extremadamente difícil conciliar el sueño.

Investigación sobre la ansiedad y el sueño

Sin embargo, existe suficiente investigación sobre cómo la ansiedad puede afectar el sueño y viceversa.

Según la ADAA, la investigación muestra que los trastornos del sueño se presentan en casi todos los trastornos psiquiátricos.

En un pequeño estudio de 2015, los investigadores examinaron la relación entre la terapia cognitivo-conductual (TCC) y la calidad del sueño en personas con ansiedad. Los investigadores determinaron que tanto la calidad del sueño como la latencia del sueño (el tiempo que toma conciliar el sueño) mejoraban en los participantes que respondían a la terapia cognitivo-conductual.

Los investigadores creen que tratar los problemas para dormir durante el tratamiento de la ansiedad puede ser beneficioso para las personas que tienen problemas para dormir.

Es importante recordar que puede tomar tiempo encontrar el enfoque de tratamiento correcto para tu ansiedad. Debido a esto, tú y tu médico pueden elegir usar una diversidad de diferentes opciones de tratamiento.

Tratar las afecciones subyacentes

Existen algunas afecciones médicas que pueden causar síntomas de ansiedad. Incluyen:

Si cualquiera de estas afecciones está causando tu ansiedad durante la noche, tu médico querrá tratarlas primero.

Psicoterapia

Existen muchas formas de psicoterapias que pueden tratar la ansiedad. Uno de los métodos mejor establecidos es la terapia cognitivo-conductual. La terapia cognitivo-conductual es una forma de psicoterapia que estimula el cambio de patrones de pensamiento para mejorar tu comportamiento y estado de ánimo.

Según la ADAA, puede tomar de 12 a 16 semanas empezar a ver los resultados con la terapia cognitivo-conductual.

Medicamentos

En muchos casos, tratar la ansiedad requiere un enfoque doble. Tanto la psicoterapia como los medicamentos pueden usarse en conjunto para obtener mejores resultados.

Existen varios tipos de medicamentos que tu médico puede recetar para tu ansiedad. Puede hablar contigo sobre las ventajas y desventajas del medicamento, la disponibilidad y más.

Los medicamentos más comunes que se recetan para los ataques de ansiedad agudos son las benzodiacepinas. Los medicamentos más comúnmente recetados para casos a largo plazo de ansiedad son los antidepresivos.

Medicina alternativa

Para algunas personas, la medicina alternativa es otra opción de tratamiento para la ansiedad.

La investigación sobre la medicina herbal y botánica para la ansiedad es mucho más limitada que la medicina tradicional. Sin embargo, una revisión sistemática de 2010 determinó que tanto los suplementos nutricionales como de hierbas pueden ser terapias valiosas para la ansiedad.

Existe evidencia fuerte de la efectividad de los suplementos que contienen pasiflora, kava, L-lisina y L-arginina.

Ten presente que la Dirección de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) no regula la calidad o pureza de los suplementos como lo hace con los medicamentos. Habla con tu médico antes de probar los suplementos para asegurarte de que no ocurra ninguna interacción.

A continuación, encontrarás algunos consejos de estilo de vida que pueden ayudar a relajarte y aliviar tu ansiedad durante la noche.

Meditación

La meditación es la práctica de la consciencia plena. La evidencia sugiere que incluso una sesión de meditación puede ser beneficiosa para reducir tu ansiedad. Incluso se pueden ver más beneficios a largo plazo.

Meditar justo antes de ir a la cama puede ser una forma fantástica de reducir la ansiedad a la hora de dormir.

Respiración profunda

La respiración profunda es una excelente forma de reducir la ansiedad y el estrés. Respirar profundamente puede reducir tu ritmo cardíaco y mejorar tu presión sanguínea.

Si experimentas un ataque de pánico en la noche, prueba la respiración profunda para aliviar el ataque.

Afianzamiento

La ansiedad puede causar episodios de disociación. El afianzamiento es una forma de mantenerte presente en el momento.

Las técnicas de afianzamiento incluyen conciencia cognitiva y sensorial, como tocar un objeto o decir en voz alta la fecha del día. Hacer esto en la noche antes de ir a la cama puede ayudar a regresarte al momento presente para que puedas dormir.

Lista de pendientes

Si uno de los desencadenantes de tu ansiedad involucra preocuparte por tus actividades diarias, puedes notar que tu ansiedad aumenta más durante la noche. Crear una lista de pendientes para el día o la semana puede ayudarte a eliminar parte de esa ansiedad.

Hábitos de sueño saludable

Una de las formas más importantes de aliviar la ansiedad en la noche es a través de hábitos de sueño saludables. Asegurarte de estar feliz y cómodo en tu propia habitación ayudará a mejorar tu calidad del sueño.

Existen muchas maneras para establecer buenos hábitos de sueño y asegurarte de que duermes mejor y por más tiempo:

Haz ejercicio a diario

El ejercicio puede ayudarte a mejorar tanto la calidad como la duración del sueño. Si experimentas ansiedad durante la noche, el ejercicio en la mañana puede ayudarte a dormir más tiempo durante la noche, mientras que el ejercicio en la tarde también tiene beneficios para el sueño.

El ejercicio extenuante aumenta la temperatura de tu cuerpo y el ritmo cardíaco, así que hacer ejercicio antes de ir a la cama puede interrumpir el proceso de conciliar el sueño. Sin embargo, el ejercicio regular es mejor para dormir que no hacer nada de ejercicio, y encontrar una rutina que funcione para ti es lo más importante.

Además, el ejercicio no solo es bueno para mejorar el sueño, también puede ayudar a aliviar tus síntomas de ansiedad.

Desarrolla un horario para dormir

Establecer un horario para dormir puede ayudarte a controlar tu reloj circadiano. Cuando mantienes tus ciclos de vigilia y sueño aproximadamente a la misma hora todos los días, puedes encontrar que es más fácil conciliar el sueño durante la noche.

Evita los estimulantes antes de dormir

Los estimulantes pueden empeorar los síntomas de la ansiedad. Además, debido a que los estimulantes aumentan la actividad del cuerpo, tomarlos antes de ir a la cama puede hacer más difícil conciliar el sueño.

El alcohol y la cafeína pueden tener un efecto negativo en el sueño, así que asegúrate de evitarlos antes de ir a la cama.

Apaga los aparatos electrónicos

Cuando finalmente te metes a la cama, retira los aparatos electrónicos. Un estudio de 2017 determinó que, en la mayoría de los 350 adultos participantes, el uso de los aparatos electrónicos después de la hora de dormir se relacionó directamente con la cantidad de tiempo que les tomaba conciliar el sueño.

Esto se debe a que se considera que la luz azul artificial de los aparatos electrónicos elimina la melatonina, la hormona del sueño, lo que hace más difícil conciliarlo (y permanecer dormido).

Crea comodidad

Las almohadas y los colchones deberían ser cómodos y dar soporte a tu cuerpo y estilo de dormir. Tu habitación es tu propio espacio, así que convertirlo en un espacio cómodo y seguro para dormir puede hacer la diferencia para tu ansiedad durante la noche.

La ansiedad constante que dificulta dormir en la noche puede afectar tu calidad de vida diaria. Tu desempeño en el trabajo o la escuela puede empeorar, y podrías considerar difícil completar tus tareas diarias normales.

Si la ansiedad y la falta de sueño afectan tu vida de esta manera, es importante comunicarte con un médico o especialista en salud mental para obtener ayuda.

Para algunas personas, la ansiedad durante la noche puede causar insomnio. El insomnio se define como un problema persistente para conciliar el sueño y permanecer dormido. El insomnio crónico puede tener efectos negativos en la salud, incluyendo un riesgo aumentado de:

  • afecciones médicas, como presión arterial alta y sistema inmunitario debilitado
  • afecciones de salud mental, como depresión
  • accidentes

Si tu médico te diagnostica ansiedad, insomnio o ambos, buscar ayuda es el primer paso en el proceso de tratamiento.

Existen muchos motivos por los que tu ansiedad puede empeorar durante la noche. Los estresantes diarios, malos hábitos de sueño y otras afecciones médicas pueden aumentar la ansiedad y los ataques de pánico en la noche.

Sin embargo, existen muchos tratamientos disponibles que pueden ayudar a aliviar tu ansiedad y mejorar tu calidad del sueño. Si estás preocupado porque tu ansiedad durante la noche y la falta de sueño están afectando tu vida, nunca es demasiado tarde para aprovechar los recursos de salud mental disponibles para ti.

Estos recursos en línea pueden ayudarte a encontrar un profesional de salud mental cerca de ti:

Lee el artículo en inglés.

Traducción al español por HolaDoctor.

Edición en español por Suan Pineda el 10 de agosto de 2021.

Versión original en inglés escrita el 20 de diciembre de 2018.

Última revisión médica en inglés realizada el 20 de diciembre de 2018.